GUATEMALA; Pronunciamientos y golpes militares

De Dicionário de História Cultural de la Iglesía en América Latina
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El golpe de Estado de 1954 y una nueva Constitución

Después de negociarse en San Salvador el cambio de Gobierno de Guatemala, con la mediación del nuncio apostólico y el embajador de los Estados Unidos, el 3 de julio de 1954 entró triunfalmente a la capital guatemalteca el coronel Carlos Castillo Armas (1954-1957), asignado para dirigir los destinos del país mediante una junta militar con el propósito de pacificar el. Castillo Armas asumirá el poder con un grupo muy heterogéneo de anticomunistas.

Lo cierto es que desde el principio se cometieron verdaderos atropellos. Por medio de un «Estatuto Político» se desconoce la Constitución de 1945 y se convoca a una nueva Asamblea Constituyente. Con la «Ley Preventiva contra el Comunismo» se cierran las puertas al diálogo entre los diversos sectores del país.

Desde muy pronto comienzan a verse las luchas por el poder entre las facciones que ocasionalmente se aliaron. En el Ejército se hace una gran purga de los militares que hubieran tenido alguna simpatía con el pensamiento del depuesto Jacobo Arbenz. Hay algunas intentonas de sublevación que enseguida son ahogadas y se ponen en marcha algunos proyectos.

Una Asamblea Constituyente redacta la nueva Constitución, la de 1956, fiel reflejo de la confusión dominante. A la Iglesia se le devuelve su personalidad jurídica. Como el presidente Castillo Armas no se somete a la voluntad de alguno de los grupos ocultos de poder, lo mandan a asesinar en la misma Casa Presidencial el 26 de julio de 1957, un crimen nunca aclarado.

Interinamente asume la jefatura del Estado el licenciado Luis Arturo González, quien es sustituido por una junta militar que se ve obligada a llamar al coronel Guillermo Flores Avendaño (1957-1958). Otro hombre honesto que poco tiempo después convoca a elecciones presidenciales.

En un ambiente muy tenso y confuso, el vencedor de la justa electoral es el general Miguel Ydígoras Fuentes (1958-1963), un hombre de «ley y orden» con preocupaciones sociales, quien asume la presidencia el 2 de marzo de 1958. Gracias a las abundantes ayudas de la «Alianza para el Progreso», promueve diversas obras populares de desarrollo.

En 1960 apoya directamente a la CIA para la invasión de Cuba en Bahía de Cochinos, sentando un precedente que luego se revirtió contra Guatemala. El 13 de noviembre de 1960 se alzó un grupo de jóvenes oficiales con Luis Turcios Lima, Marco Antonio Yon Sosa, y otros que fueron los fundadores del movimiento guerrillero que protagonizó el conflicto armado interno o guerra civil durante 36 años, para establecer un modelo socialista-comunista de sociedad en contra del modelo capitalista-liberal.

En 1961, en Punta del Este, Uruguay, los gobiernos de América Latina y Estados Unidos firman el acuerdo que da vida a la «Alianza para el Progreso» como un esfuerzo histórico coordinado para alcanzar el desarrollo del sub-continente sub¬desarrollado, de acuerdo con los patrones económicos norteamericanos.

Esta alternativa a la revolución marxista cubana y al surgimiento de las guerrillas y a la agitación social en todo el Continente, hace que el gobierno del presidente John F. Kennedy impulse la «Alianza para el Progreso», los Cuerpos de Paz, y una amplia gama de proyectos para el desarrollo.

Pero las protestas se extienden por doquier; en Guatemala en marzo y abril de 1962, y fueron reprimidas con violencia y derramamiento de sangre. A partir de ese momento se impone la corrupción como práctica habitual, con el firme respaldo de la Administración norteamericana, que así quería responder al desafío revolucionario ejemplificado con la cercana Cuba.

A fines de 1965, sesenta y una agencias norteamericanas financian bastantes proyectos de desarrollo y se multiplican los misioneros y voluntarios norteamericanos;[1]se fomenta una reforma tributaria que fracasa; se hacen tímidos intentos de transformación agraria, se implementan programas cooperativos, educativos, sanitarios, viales, etc.

Una cadena de pronunciamientos y golpes militares

La situación política de Guatemala se deteriora a tal grado que el 30 de marzo de 1963, el Ejército dio un golpe de Estado encabezado por el mismo ministro de defensa, el coronel Enrique Peralta Azurdia (1963-1966).

Comenzaron con un plan estratégico llamado «Operación Honestidad», que fue el primer golpe militar de toda una cadena que unió a toda América Latina para enfrentar la amenaza guerrillera según la «doctrina de la seguridad nacional», llegando a militarizar todo el continente con la excepción de México, Venezuela y Colombia.

Trataron de poner orden en el Estado, continuaron el plan de construcción de escuelas y carreteras. Desconocieron la Constitución de 1956 y promovieron la Constitución de 1963 en la misma línea que la anterior tratando de garantizar un sistema económico fundado en las agro-exportaciones tradicionales (café, algodón, banano, carne, etc.) y en las industrias de transformación para el Mercado Común Centroamericano, dando amplias garantías a la iniciativa privada e inversionistas extranjeros, bloqueando toda posible reforma social seria, y asegurando el absoluto control del poder militar y su hegemonía sobre los poderes ejecutivo, legislativo y judicial.

Convocaron a elecciones en los primeros meses de 1966. El candidato favorito era el licenciado Mario Méndez Montenegro, político de gran carisma, pero en plena campaña inexplicablemente se suicidó.[2]Entonces lo reemplazó su hermano el licenciado Julio Cesar Méndez Montenegro (1966- 1970), que en binomio con el periodista Clemente Marroquín Rojas, ganaron las elecciones y tomaron posesión el 1 de julio de ese año.

Aunque asumían el poder unos civiles, el Ejército los obligó a aceptar tales condiciones que comenzaron a gobernar con las manos atadas. Además, poco antes de la toma de posesión el Ejército hizo desaparecer a todo el Comité Central del PGT, inaugurando así el período más sangriento de toda la historia de Guatemala. A partir de entonces la guerra en la ciudad y en el campo fue atroz, causando muchas víctimas inocentes. En vez de apaciguarse el país se polarizó aún más.


NOTAS

  1. Roanld F. VENEZIA, List of American Voluntary Agencies Maintening Programs in Rural Guatemala, USAID/G December 8, 1965.
  2. Mario Méndez Montenegro (Santa Rosa, Guatemala, 30 de noviembre, 1912 – 31 de octubre 1965) abogado y notario guatemalteco, alcalde de la ciudad de Guatemala de 1944 a 1948 y miembro fundador del Partido Revolucionario.

BIBLIOGRAFÍA

HERNANDEZ DE LEON, Federico, La gente que conocí, Tipografía Nacional, Guatemala 1958.

OTERO, Santiago F.M.E. edit., Al servicio de la Vida, la Justicia y la Paz. CEG, Guatemala, 1997. (Compendio de documentos de la CEG 1957-1997)

VENEZIA Roanld F., List of American Voluntary Agencies Maintening Programs in Rural Guatemala, USAID/G December 8, 1965

VV.AA. Diccionario Histórico Biográfico de Guatemala, 2004


RICARDO BENDAÑA PERDOMO