DOMINICOS; Las misiones de Puerto Maldonado

De Dicionário de História Cultural de la Iglesía en América Latina
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INTRODUCCIÓN

En el año 1894 el Papa León XIII hizo un llamado a los obispos del Perú mediante una carta. En ella, el Santo Padre señalaba: “...estimulamos vuestra caridad para que se multipliquen las expediciones a los indios...; lleven por entre los bárbaros pueblos la cultura de la civilización y la suavidad de costumbres, disipen las tinieblas de la ignorancia para que, por fin, aún ellos reciban, por medio de la fe, la suerte de los Santos" (Act. 26, 18).

Existía en Lima una Asociación llamada «Unión Católica de Señoras». Fueron ellas quienes movieron en solemne asamblea celebrada en noviembre de 1896 el pedido del Papa. Se confeccionaron los primeros Estatutos; y, a esa actividad, comenzó a llamársele: «Obra De La Propagación De La Fe En El Oriente Del Perú».

Después de muchos diálogos hubo, al fin, un decreto supremo en el que se aprobaba, entre otras cosas, tres Prefecturas Apostólicas que se encargarían de la evangelización en la selva del Perú: San León del Amazonas, San Francisco del Ucayali y Santo Domingo del Urubamba, bajo la responsabilidad de los agustinos, franciscanos y dominicos, respectivamente. De esta forma el Gobierno del Perú solicita a la Santa Sede el envío de misioneros.

La selva del Perú, que comprende unos 690,000 kms cuadrados, está atendida actualmente por ocho Vicariatos Apostólicos y una Prelatura. El objetivo principal es la evangelización de sus gentes en el sentido más amplio: evangelizar en el contexto de una promoción humana y social. Así, los Vicariatos Apostólicos vienen desempeñando su labor desde el comienzo de siglo XX. Gracias a ellos se ha logrado, entre otros objetivos, la integración con el resto del país, la defensa de la dignidad de sus moradores y la protección de las fronteras nacionales dentro del contexto evangelizador.[1]

VICARIATO APOSTÓLICO DE PUERTO MALDONADO

El Papa León XIII crea, el 5 de enero de 1900, la Prefectura Apostólica del Urubamba; y, al año siguiente, la Sagrada Congregación de Propaganda Fide nombra al P. Ramón Zubieta y Les, de la Orden de Predicadores, Prefecto Apostólico de la misión de Santo Domingo del Urubamba (Decretum S.C.P.F. del 27 de setiembre 1901). Los primeros dominicos que llegaron pertenecían a la provincia española del Rosario y a la provincia San Juan Bautista del Perú.

El año 1906 la Santa Sede confía a los dominicos de la provincia dominicana de España las misiones de la Prefectura Apostólica. El año 1913, 4 de julio, Pío XI eleva la Prefectura a Vicariato Apostólico del Urubamaba y Madre de Dios. El 10 de marzo de 1949, por un decreto de la S.C. de Propaganda Fide (AAS. 1949 p. 429) recibe el nombre actual: Vicariato Apostólico de Puerto Maldonado.

Los obispos dominicos que han regido sucesivamente el vicariato son los siguientes:

  • Ramón Zubieta y Les, prefecto 1901 y primer obispo 1913 (+1921)
  • Sabas Sarasola Esparza, obispo 1923 (+1944)
  • Enrique Álvarez González, obispo 1946 (+1948)
  • José María García Graín, obispo 1949 (+1959)
  • Javier Miguel Ariz Huarte, obispo 1952-1980 (+1995)
  • Juan José Larrañeta Olleta, obispo 1976.

Extensión

El Vicariato Apostólico de Puerto Maldonado tiene una extensión aproximada de 150,000 kms cuadrados. Se ubica en la frontera con Brasil y Bolivia y limita con los departamentos de Ayacucho, Apurímac y Puno, comprende:

  • El departamento de Madre de Dios
  • La provincia de La Convención, del Departamento de Cuzco
  • La provincia del Purús, del departamento de Ucayali
  • El distrito de Sepahua, provincia Atalaya, departamento de Ucayali
  • El distrito de Camanti, provincia Quispicanchis, del departamento del Cuzco.

Habitantes

A finales del siglo XX, el número de habitantes en todo el vicariato oscila en alrededor de 230,000. Los moradores del vicariato podrían clasificarse en:

  • Comunidades nativas: Machiguengas, Piros, Amahuacas, Yaminahuas, Campas, Ashánincas, Culinas, Sharas, Mastanahuas, Cashinahuas, Yuses, Sharanahuas, Amarakaeris, Huachipairis, Huarayos, Santarrosinos, Toyeris, Iñaparis, Arasairis, Shireneris, Chamas.
  • Moradores de habla quechua.
  • Moradores de origen loretano.[2]
  • Colonias diversas asentadas desde los primeros años: arequipeña, japonesa, limeña...

Características

Para una visión adecuada de la problemática de todo el vicariato es conveniente dividir la jurisdicción eclesiástica en tres grandes zonas con características propias:

a) Zona Madre de Dios: Al principio estuvo fuertemente marcada por el boom del caucho (1894-1918). Fueron años de persecución a los nativos, zaheridos y esclavizados. Vino el proceso de pacificación (1940), a través de los misioneros, quienes habían establecido, desde 1902, cauces de apoyo religioso, educativo y sanitario; y basados también en el enorme trabajo desplegado por el dominico P. José Álvarez lograron la pacificación de la zona.
Con el declive del caucho esta área ha sido escenario de sucesivas expectativas económicas como el petróleo (1978), madera y oro (1976). Los lavaderos de oro, primero, y la presencia de numerosas máquinas, junto con la creciente emigración desde las partes altas de los Andes siguen creando múltiples problemas por la calidad de vida inhumana y por la depredación a que se ven sometidas las tierras, las quebradas y los ríos afectados. Desde 1996, vuelve la expectativa petrolífera que despierta bastante interés. Madre de Dios sigue siendo un departamento olvidado y aislado por la falta de vías de comunicación tanto al exterior como al interior del mismo.
b) Zona del Alto Urubamba: Comprende la provincia La Convención hasta el Pongo Mainique. Esta región es mencionada en los relatos de los tiempos del virreinato junto con la famosa zona de Vilcabamba, refugio de los incas ante la dominación española. En el siglo XVI se habla de las plantaciones de azúcar en el valle con la presencia de los grupos machiguengas, habitantes y dueños del territorio.[3]
Es a partir del siglo XIX cuando esta región se organiza como provincia con sus límites y distritos, constituyéndose Quillabamba como su capital. En la década de los años sesenta del siglo XX tuvo lugar el movimiento de guerrillas, el cual finalizó con la ley de la reforma agraria que termina con las haciendas y distribuye la tierra a los campesinos, unidos en sindicatos y formando la Federación Provincial de Campesinos.
En los finales del siglo XX y comienzos del XXI tiene el reto del manejo de sus tierras al haberse originado el gran éxodo de gentes venidas de las zonas altas de los Andes. Hay una lucha reñida por la defensa de las tierras y por los cultivos tradicionales: café, cacao, achiote, coca, etc. Hoy en día los bajos precios del café y la progresiva depauperación de la comercialización de la coca hacen muy difícil la vida del campesinado.
c) Zona del Bajo Urubamba y Purús: Comprende desde el Pongo Mainique hasta la confluencia del Urubamba con el río Tambo; de igual manera abarca todo el río Purús. Es una vasta región donde viven mayoritariamente comunidades nativas. Ellos sufren diversas opresiones por parte de gentes venidas de fuera. La región del Bajo Urubamba ha estado expuesta a persecuciones, explotaciones y esclavitud. Primero estuvo dominada por la época del caucho (1894-1918), después por la hacienda de igual ideología.
A partir del año 1963 se da la explotación maderera y con ella se repite la historia anterior. El año 1972 y 1982 llegan las compañías petroleras, bajo condiciones aparentemente óptimas, originan el abandono de las chacras (pequeñas parcelas de tierras cultivadas), el uso creciente del alcohol, la prostitución y la creación de una población flotante en espera de nuevos contratos. A finales del siglo XX regresaron las compañías de petróleo para labores de extracción (gas de Camisea) y exploración en toda la zona. Los habitantes del Bajo Urubamba siguen expuestos a vivir una problemática venida del exterior y con repercusiones notables para ellos.

LOS MISIONEROS DOMINICOS

Desde que, a pedido del Gobierno peruano, la Iglesia confiara en 1900 a los dominicos la evangelización de una parte oriental del Perú difícil, inhóspito e incomunicado, fueron muy grandes las dificultades que enfrentaron. No existían vías de comunicación, y penetrar en la tierra designada encerraba enormes peligros.

Por otro lado, el misionero dominico debía anunciar el evangelio más difícil, más audaz y más complicado; porque no se trataba sólo de un campo de misión con terribles escollos, sino que debía realizarse en sociedades y grupos humanos donde la esclavitud, la explotación, la marginación, la falta de identidad, la inseguridad de unas vidas, la pérdida de la dignidad humana y la ausencia elemental de unos derechos, dificultaba el accionar misionero.

Los primeros dominicos quemaron muchas energías en abrir rutas, conocer ríos, rectificar mapas incorrectos, preparar expediciones arriesgadas, enfrentarse a situaciones generalizadas de explotación que trajeron sinsabores, lágrimas y muertes. Poco a poco el misionero fue conociendo al indígena y el indígena fue conociendo también al misionero.

De esta forma el indígena pudo constatar que, entre los venidos de fuera, no todos eran buscadores avaros de riqueza a costa de tropelías, amedrentamientos y extorsiones, sino que también había gente diferente, respetuosa con ellos, que eran capaces de defenderlos contra desmanes y abusos que sufrían, que deseaban para sus hijos unas condiciones de vida mejor y un futuro para sus comunidades perdidas irremediablemente. Los misioneros dominicos predicaron hasta el cansancio que aquellas gentes eran también hijos de Dios y como tales, tenían derecho a recobrar la dignidad perdida y la libertad dañada en su fibra más íntima: la esclavitud.

Los misioneros dominicos optaron por acompañar al indígena en todos sus procesos. Para ello utilizaron todos los medios materiales y espirituales que hicieran posible una tarea evangelizadora en su máxima expresión: salud, educación, vivienda, higiene, desarrollo comunal, capacidad de defensa voz propia, etc. El misionero proporcionaba al indígena condiciones de libertad para que ellos estuvieran en disposición de abrazar voluntariamente la fe que se les ofrecía. Es cierto que el misionero dominico elegía el lugar de misión; pero es cierto también que el indígena elige al misionero, elige vivir con él en la Misión y elige la Misión como garantía de una recuperación de las identidades perdidas y del encuentro con una doctrina beneficiosa para ellos.

El año 1913 monseñor Zubieta traía las primeras religiosas dominicas al Perú, e ingresaban a Puerto Maldonado en 1915, donde fundaron el primer colegio: «Santa Rosa de Lima». El año 1918, monseñor Zubieta y la madre Ascensión Nicol fundaban la congregación de «Misioneras Dominicas del Santísimo Rosario». Con ellas la misión se veía enriquecida en los campos de educación, salud y promoción de la mujer.

El año 1937, monseñor Sarasola funda el hospital para dar respuesta a la zona diezmada por el paludismo. Ese mismo año, el obispo establece la «Granja de Misiones» de Quillabamba con un internado de jóvenes de las distintas comunidades nativas. En 1953, monseñor Javier Ariz funda la Asociación de Misioneros Seglares. Quería introducir mujeres a la selva para que se dedicaran íntegramente a labores educativas. Así nació la Red Escolar de la Selva del Sur Oriente Peruano (RESSOP). Actualmente la RESSOP agrupa a 44 centros escolares distribuidos en los lugares más lejanos del vicariato.

El año 1957 se inaugura en Puerto Maldonado la emisora religioso-cultural «Radio Madre de Dios». Este mismo año se establece la red de comunicaciones radiales. A partir de este momento, los puestos misionales gozarían de la comunicación diaria. En 1966, merced a la Resolución JPNT N° 473, era transferida y adquirida por los misioneros dominicos Radio Quillabamba. Con las dos emisoras, el vicariato cubría las expectativas de sus pobladores diseminados en la amplia y extensa Misión.

El año 1973 comienza, en el Alto Urubamba, el trabajo pastoral con las primeras comunidades cristianas campesinas. El trabajo se extiende, diez años más tarde, a la zona de Madre de Dios. A finales del siglo XX las comunidades cristianas campesinas y nativas oscilaban ya alrededor de 250. El año 1983, a petición del Ministerio de Educación, el Vicariato Apostólico se hace cargo de la Escuela Normal que recibe el nombre actual de Instituto Superior Pedagógico «Nuestra Señora del Rosario» en Maldonado.

En marzo de 1985, Monseñor Larrañeta funda el seminario diocesano «San Juan María Vianney» para dar acogida a los jóvenes con aspiraciones sacerdotales. El año 1992, y después de once años de trabajo integral de salud en Sepahua y Kirigueti, se establece el Proyecto Integral de Salud de la Amazonia Peruana (PISAP) que agruparía a 33 profesionales en siete puntos neurálgicos de la misión. En junio de 1994 se funda el monasterio de monjas dominicas de vida contemplativa, «Nuestra Señora del Rosario», en la ciudad de Quillabamba.

Este resumen histórico de los acontecimientos eclesiales más sobresalientes, desde el inicio de la misión confiada a los dominicos, quiere ser un pálido reflejo de la vitalidad y dinamismo que ha presidido esta Iglesia local. Todos los sucesos, creaciones e instituciones fundadas han estado y están envueltas bajo el carisma dominicano, ya que la misión, en el Vicariato Apostólico de Puerto Maldonado fue confiada y sigue en el ya entrado siglo XXI bajo la tutela de la orden de Predicadores. Es el matiz propio que distingue a los dominicos de otras órdenes y congregaciones religiosas.


EVANGELIZACIÓN INTEGRAL

Introducción

El Vicariato Apostólico de Puerto Maldonado dedica todos sus esfuerzos en una labor de evangelización, anuncio de Cristo y consolidación de la fe de sus gentes. Para ello cuenta, bajo la responsabilidad del obispo, con numerosos agentes pastorales: sacerdotes, religiosos, religiosas, misioneros seglares, catequistas, personas cualificadas por su sensibilidad religiosa, etc. Ellos ofrecen un testimonio vivo del quehacer pastoral orientado a dirigir las vivencias religiosas de sus fieles.

Todo el quehacer pastoral está centrado en seis comisiones pastorales fundamentales: 1) Comunidades nativas. 2) Comunidades cristianas campesinas. 3) Pastoral social. 4) Pastoral urbana. 5) Pastoral juvenil. 6) Pastoral familiar.

Principios

Los principios por los que se rige el Vicariato son:

  1. El Vicariato Apostólico de Puerto Maldonado, como institución de la Iglesia Católica, se ubica en un terreno netamente misionero. Su objetivo es la implantación y consolidación de la Iglesia en estos lugares apartados a través de la evangelización.
  2. La evangelización supone el anuncio explícito de Jesucristo, enviado por el Padre, que viene al mundo y nos deja su Espíritu, salvando al hombre y liberándolo del pecado personal y social. El evangelizador ofrece un testimonio de vida auténticamente cristiano. De este modo se consagra a Dios y a los demás y pone los fundamentos para edificar una Iglesia local autóctona.
  3. Liberar al hombre, en el vicariato, es transformar las estructuras de pecado en estructuras de dignidad humana y cristiana, donde la fe en Jesucristo dé sentido a una verdadera justicia social y a un auténtico desarrollo integral de las gentes confiadas a nosotros.
  4. Una vida cristiana, en este contexto, supone una vida en condiciones de dignidad e igualdad de derechos en el Perú. Lamentablemente, en muchos de estos lugares no se trata ya de rescatar la dignidad humana sino de instaurarla, ya que nunca existió. Lo mismo se puede afirmar de los derechos humanos.
  5. La vida es el principal y el único tesoro de los pobres. Los pobladores de estas regiones son objeto de ataques internos y externos que inciden trágicamente en desnutrición, hambre y muerte. Por eso, la defensa de la vida es esencial en la predicación cristiana y misionera.
  6. La misión, en esta Iglesia local, ha sido y es: la evangelización integral: promoción humana y social, defensa de sus tierras, educación intelectual en sus diversos niveles, fomento de las vocaciones sacerdotales y religiosas, desarrollo social, agrícola y ganadero, vivienda y alimentación digna, salubridad e higiene, atención esmerada a los graves problemas de salud, formación permanente de los catequistas, coordinadores y responsables de las comunidades cristianas campesinas y nativas presentes en el Vicariato, medios de comunicación social a través de los cuales se da voz a los que no la tienen. Todo ello es prioridad clara de esta misión.
  7. El Vicariato Apostólico de Puerto Maldonado, desde 1900, se ha constituido en institución permanente y organizada que, a partir de su labor evangelizadora, vela por la promoción integral de todos los integrantes que habitan en su jurisdicción eclesiástica. Cada año existe un intento en seguir profundizando en la estructura integral de promoción paro quo favorezca el desarrollo armónico de sus gentes. Es parte del reto evangelizador.

Personal Humano

Para llevar a cabo las distintas acciones, el Vicariato contaba a finales del siglo XX con los siguientes grupos humanos:

Varones

a) Sacerdotes dominicos (24)
b) Religiosos dominicos (4)
c) Sacerdotes diocesanos (11)
d) Sacerdotes salesianos (1)
e) Hermanos maristas (4)

Mujeres

a) Monjas dominicas de vida contemplativa (10)
b) Misioneras dominicas del Rosario (25)
c) Misioneras eucarísticas de Nazareth (3)
d) Carmelitas misioneras (5)
e) Misioneras hijas de la P.V. María (9)
f) Dominicas del Rosario de Brasil (3)

Misioneros Seglares

a) Misioneros Seglares de Puerto Maldonado MISEMA (60)
b) Operación Matto Grosso O.M.G. (10)
c) Organización de solidaridad internacional-AM.S. (2)
d) Asociación Solidaridad Rayos de Sol (1)

Grupos humano-pastorales

a) Seminario San Juan María Vianney, Pto. Maldonado
b) Comunidades cristianas campesinas, rurales
c) Clubes juveniles
d) Hermandades y cofradías
e) Legión de María
f) Movimientos apostólicos

Instituciones de promoción humana-social

1. «Cáritas de Puerto Maldonado» (sede en Quillabamba y Puerto Maldonado); es una asociación religiosa que se rige por los estatutos propios emanados del código civil. Los principales fines de «Cáritas» son:

  • La promoción humana y social del hombre para llegar a conseguir su desenvolvimiento integral.
  • Propiciar un auténtico desarrollo del Vicariato por medio de programas educativos y de sistemas de autoayuda.
  • Estimular, realizar y coordinar obras de servicio benéfico asistenciales para los sectores necesitados del Vicariato, especialmente en los momentos de emergencia.
  • Encauzar las obras de pastoral social de la Iglesia como apoyo organizado para el desarrollo de los pueblos.
  • Despertar la conciencia del pueblo de Dios sobre sus deberes de caridad, justicia y solidaridad en el mundo de hoy.

2. «Alas de esperanza»; es una Asociación que agrupa a miembros individuales, y a través de su dinamismo, como organismo no gubernamental, ayuda y ofrece sus servicios-aéreos para zonas deprimidas y aisladas. Los objetivos de «Alas de Esperanza» son:

a) Como organismo no gubernamental es humanitario, sin ánimo de lucro, comprometido con los planes de desarrollo dentro de la zona asignada, y tratando de socorrer a los más pobres tanto en las zonas de comunidades nativas como comunidades campesinas.

b) — Prepara, ayuda y colabora en los distintos programas de desarrollo humano, técnico y social, mediante las técnicas de comunicación y transporte aéreo. — Apoya las iniciativas de comunidades aisladas, tanto agrícolas como ganaderas, lo mismo que en zonas aisladas, favoreciendo la explotación, producción y comercialización de sus productos. — Presta servicios aéreos buscando el mejoramiento y la expansión de infraestructuras, como pistas de aterrizaje, mantenimiento mecánico, instrucción de personal, bases de radio, etc., a fin de garantizar la ayuda a situaciones y zonas aisladas.

c) contribuye al mejoramiento de la salud: — Ayudando a los programas de formación, prevención y asistencia. En este sentido colabora con las instituciones hospitalarias existentes en el medio. — Efectúa evacuaciones de emergencia, transportando los recursos humanos y materiales para esta acción.

4. mantiene relaciones y espíritu de colaboración con organismos nacionales e internacionales de solidaridad y ayuda, tendentes a lograr cooperación y apoyo con personas cooperantes, recursos y otros, a fin de mantener la operación.

5. Colabora eficazmente en la promoción educativa de las distintas comunidades ayudando a los profesores en la construcción de aulas, talleres, internados, etc.

3. Organismos educativos del Vicariato

a) La RESSOP: (Red Escolar de la Selva del Sur Oriente Peruano) es un programa educativo del Vicariato, como medio de evangelización a los pueblos indígenas, y en orden a la ejecución de la pastoral educativa, con el fin de que la Iglesia se convierta, cada vez más, en sujeto activo del cambio de estos pueblos amazónicos. En la actualidad, la RESSOP agrupa 44 centros educativos dependientes del Vicariato y ubicados a lo largo y ancho de la jurisdicción eclesiástica.

Son objetivos de la RESSOP:

1.La incorporación de los pueblos indígenas del Vicariato Apostólico a la sociedad nacional peruana de acuerdo al fin de su creación.
2. El logro se realiza mediante:
  • La creación de centros y programas educativos allá donde no llega el Estado.
  • La formación de profesores nativos a través del Instituto Superior Pedagógico en curso regular y mediante el curso de profesionalización, actualización y especialización.
3. La promoción del desarrollo de los pueblos indígenas mediante el proceso de una educación en desarrollo.

b) I.S.P.N.S.R. (Instituto Superior Pedagógico Nuestra Señora del Rosario): La Escuela Normal fue creada a instancias del Ministerio de Educación del Perú y solicitada para su regencia al Vicariato Apostólico de Puerto Maldonado. Ubicada en Puerto Maldonado, la Escuela Normal, convertida hoy en Instituto Superior Pedagógico, imparte enseñanza en curso normal y en cursos de profesionalización en los meses de verano. El instituto, regido por misioneros seglares, trata de paliar el déficit alarmante de profesores intitulados en el departamento de Madre de Dios. Ya en el año 1983 existían alrededor del 73%, cifra que avalaba la asunción de la gestión.

4. Cenecape y Centros Educativos

Existen Centros Educativos del Vicariato Apostólico como son: Cenecape de Vilcabamba y Lucma, provincia La Convención, Cuzco, con talleres e internado para alumnos pobres en estudios de secundaria. Cenecape de Puerto Esperanza, provincia Purús, Ucayali, a cargo de la Misión de Esperanza.

Centro Educativo Santa Rosa y Santa Cruz de Puerto Maldonado dirigido por misioneras dominicas y misioneras seglares. Cada uno de los centros tiene primaria y secundaria.

5. Los Internados

Un esfuerzo notable es el que se realiza a través del sistema de internado. Las enormes distancias con respecto a los centros escolares de los pobladores de estas regiones hacen que sea necesario el internado. Alumnos que desean estudiar primaria y, sobre todo, secundaria hacen necesaria la presencia del internado. Ya a finales del siglo XX se habían creado internados en: — Puerto Maldonado, Mazuko, Quincemil, Shintuya, Koribeni, Timpía, Kirigueti, Sepahua (uno para varones y otro para mujeres), Puerto Esperanza, Vilcabamba, Lucma.

6. El PISAP (Plan Integral de Salud Amazonía Peruana)

El PISAP, como integrante de la Pastoral Social del Vicariato, es un proyecto integral que intenta mejorar la atención sanitaria de la zona y la organización de una red sanitaria apropiada, mediante la formación del personal sanitario —con especial atención a los promotores de salud— y mediante actividades curativas y preventivas, así como aquellas susceptibles de mejorar las condiciones de vida de la población.

Los objetivos específicos son:

a) Que cada comunidad cuente, al menos, con un agente de salud debidamente capacitado, al cual se le proporcione la formación o capacitación y su seguimiento.
b) Que cada comunidad cuente con un botiquín debidamente equipado.
c) Disponer de recursos humanos peruanos y recursos técnicos y económicos para cubrir la demanda asistencial de la población.
d) Promocionar al personal autóctono para cubrir los servidos de salud a nivel técnico sanitario.
e) Mejorar la situación materno-infantil:
  • Control de enfermedades respiratorias agudas.
  • Control de enfermedades diarreicas agudas.
  • Vigilancia y promoción nutricional.
  • Ampliación de cobertura vacunal.
  • Controlar el mayor número posible de madres gestantes.
  • Formar a la población en materia de planificación familiar.
f) Controlar de manera especial las enfermedades más prevalentes en la zona: IRA, EDA, TBC, leshmaniasis, parasitosis, malaria, desnutrición, así como enfermedades prevenibles por vacunación.
g) Mejorar la nutrición, uso y salud bucal de la zona.
h) Construcción, uso y conservación de letrinas por familias.

Los lugares que agrupan el PISAP comprenden: hospitales, postas médicas y consultorios parroquiales. Son los siguientes:

— Dos hospitales: Sepahua y Kirigueti.
— Cuatro postas médicas: Shintuya, Mazuko, Quellouno y Kirigueti.
— Dos consultorios médicos: Puerto Maldonado y Quillabamba.
7. PEASAGRO (Planta Experimental de Asesoramiento al Agricultor)

La planta experimental ha sido creada en la parroquia de Mazuko el año 1988. Tiene como finalidad el apoyar al agricultor a través de personal calificado con el objeto de que la tierra tenga un mejor rendimiento. Así mismo, la PEASAGRO trata de apoyar al agricultor para el desarrollo de la producción, extracción y comercialización de sus productos. Posteriormente, se ha dado el paso de la dotación de casas campesinas auto-gestionadas, en las cuales se encuentra la implementación de molinos, insumos, semillas y asesoramiento.

COMUNICACIÓN RADIAL

Con el objeto de establecer comunicación con las poblaciones apartadas de nuestro medio y, asimismo, entre los responsables de loe puestos de misión, se llevó a efecto la creación de a) Emisoras Educativo-Culturales y b) Red de radio-transmisores (18 equipos) en los distintos puestos de misión.

a) Radio Madre de Dios y Radio Quillabamba son dos emisoras al servicio de la comunidad que desean ofrecer su aporte en favor de las organizaciones populares. Se trata de ser voz y de dar voz a poblaciones y grupos humanos marginados. Cada una de las emisoras radiales posee su propia identidad y principios fundamentales. Trabajan en Onda Corta, Onda Media y Frecuencia Modulada, respectivamente.

b) Cadena Radial. La «Fonía» dentro de los puestos de misión adquiere importancia capital especialmente para aquellos lugares donde no existe ninguna posibilidad de comunicación. La comunicación radial mediante una cadena de pequeños transmisores-receptores ayuda a las relaciones humanas, coordinaciones educativas, consultas y planificación en el ámbito de salud, etc.

c) Librerías y Bibliotecas Las librerías de Puerto Maldonado y Quillabamba, pertenecientes al Vicariato Apostólico, tuvieron una gran importancia por el servicio que en aquellos tiempos prestaron. Hoy siguen ejerciendo un servicio importante. Librería Maldonado atiende necesidades sociales importantes para gente necesitada. Librería Quillabamba subvenciona y ofrece los servicios de una excelente biblioteca con el asesoramiento de su personal.

Las bibliotecas responden a una apremiante necesidad en las poblaciones por falta de libros y literatura. Parroquias como Maldonado, Mazuko, Iberia, Puerto Esperanza y Quillabamba cumplen una misión importante: ofrecen locales de estudio y consulta, proporcionan libros de consulta y asesoran con personal calificado.

d) Nuevo Futuro (Hogares para Niños Abandonados)

El proyecto trata de acoger a cien niños abandonados y ubicarlos en hogares adecuados. Cada hogar tendrá capacidad para diez niños y será regido o cuidado por dos tutores. La finalidad del proyecto se orienta a otorgar a la niñez abandonada unos hogares que suplan el cariño y el amor que un día sus padres les negaron. Con una adecuada educación y una estabilidad de hogar habrá un seguimiento desde los primeros años hasta que ellos puedan desenvolverse por sí mismos.

Los diez hogares a finales del siglo XX –y han ido creciendo con el nuevo siglo- se ubicaban de la siguiente forma:

— Cuatro hogares en el río Purús.
— Tres hogares en Puerto Maldonado.
— Tres hogares en Quillabamba.

e) Oficina de Derechos Humanos

En Quillabamba y Maldonado. Recogen las inquietudes, abusos y problemática del medio en orden al ejercicio de una justicia no indiscriminada.

f) Consultorios Médicos Parroquiales En Maldonado y Quillabamba, con sus respectivos laboratorios y farmacias. Es una atención de servicio social de gran magnitud para los necesitados.

g) Otras acciones

Habría que destacar, también, dentro del ejercicio de promoción humana y social, la labor a través de los aserraderos, talleres, tiendas comunales, ganaderías, alfabetización, producción de tallarines o fideos, encuentros con las personas de edad avanzada, y diversos servidos que se ofrecen a las distintas comunidades.

CONCLUSIÓN

Los misioneros dominicos recibieron el encargo de atender una zona difícil y complicada en el Perú: zona evidentemente misionera en su sentido pleno. No solamente recibieron el encargo de atender, sino recibieron la enorme responsabilidad de implantar una Iglesia propia, autóctona y con garantía de futuro. Dada la complejidad de sus habitantes y de las tierras que habitaban, la misión ha sido y es extremadamente dura y difícil.

Es posible que haya habido errores a la hora de evangelizar: falta de adaptación al medio y a las culturas, prisas en los logros, impaciencia ante unas culturas desconocidas, tentación de paternalismo, etc. Pero los misioneros dominicos, desde el comienzo, hicieron causa con los marginados y explotados. Denunciaron las correrías, los genocidios, la esclavitud y la dependencia. Descubrieron que a través de los largos años de acompañamiento, ellos, los misioneros, podían también recibir el don de la evangelización por parte de las sociedades nativas y campesinas.

Los misioneros dominicos, a lo largo del siglo XX, defendieron eficazmente las fronteras nacionales sin que se perdiese un solo metro de terreno. Es más, en ambientes a veces hostiles y difíciles, iniciaron programas de desarrollo para los cuales nunca fueron preparados. Y tuvieron éxito porque los grupos humanos entendieron que algo muy serio y noble movía a aquellos extraños seres llamados misioneros. Estos, a través de los medios de comunicación social, fueron primero voz de los sin voz, para dar luego voz a los que nunca la habían tenido.

Esta realidad quizás haya sido uno de los logros más eficaces, sobre todo en el campesinado. El esfuerzo innegable en el campo educativo y sanitario ha sido tan grande, tan amplio y tan eficaz que ha desbordado las expectativas de los padres de familia. Ellos son los auténticos defensores de la escuela de los misioneros, y de la salud garantizada por la misión, prueba del acierto, la seriedad y la dedicación desplegada.

El misionero dominico recibe el encargo de dirigir una Iglesia local, debe crear un seminario diocesano, instaurar comunidades cristianas, formar profesores, abrir escuelas, talleres, hospitales, pozos de agua, viviendas, instalaciones diversas, etc. Es la dedicación total y plena a la misión en su dimensión evangelizadora más profunda: la atención a las almas a través de la proclamación de la fe, y la atención humanista mediante el trabajo intenso y sacrificado en favor de unas vidas amenazadas por la enfermedad y muerte, de unas tierras expoliadas con frecuencia y de unos grupos humanos que se encontraban faltos de esperanza. Algún día, los misioneros dominicos volverán a sus conventos y a sus claustros. Atrás quedarán todos los esfuerzos y sacrificios que pusieron en la llamada Misión del Vicariato Apostólico de Puerto Maldonado en el Perú.


NOTAS (del DHIAL)

  1. Ya Pío X en su encíclica Lacrimabili Statu, del 7 de junio de 1912, dirigida al episcopado latino-americano sobre las condiciones inhumanas en las que se encontraban los indígenas en América del Sur denunciaba aquellas situaciones trágicas. Cf. MANUEL CORNEJO CHAPARRO, La encíclica de Pío X y la defensa de los pueblos indígenas en la época del caucho. CAAAP, Centro Cultural José Pío Aza, Lima 2017. “Per gli Indi del sudamerica. Missione Pontificia di Studio”. Relazione di Studio di Giovanni Genocchi visitatore apostólico in America Latina (1911-1913). Introduzione e note di M. L. GRIGNANI, Edizioni di Storia e Letteratura, Roma 2018.
    Entre otras publicaciones recientes hay que señalar la revista “Amazonía Peruana”, publicada en Lima, en sus diversos números. Existe en el Perú hoy (s. XXI) un organismo CONAP (Confederación de Nacionalidades Amazónicas del Perú) por la defensa de los derechos de los pueblos indígenas amazónicos, su cultura, la biodiversiad y sus territorios. Existen en el Perú varios organismos que se están preocupando en la defensa de los derechos fundamentales de los pueblos amazónicos, como el: Centro Amazónico de Antropología y Aplicación Práctica, en Lima. Los estudios etno-antropológicos sobre los pueblos indígenas de la Región Amazonica Peruana han ido creciendo a la largo de los últimos años, destacando en ello las contribuciones de los misioneros que trabajan en la región, como los dominicos.
    En el mundo secular hay que recordar ente otros el trabajo de BEATRIZ HUERTAS CASTILLO, Indigenous Peoples in Isolation in the Peruvian Amazon: Their Struggle for survival and freedom, IWGIA [International Work Group for Indigenous Affairs]. Document No. 100 – Copenhagen 2004. ISBN: 87-90730-77-1.
  2. La Región de Loreto es la más grande del Perú en extensión: 368.851,95 Km2, y con una población que ronda casi el millón de habitantes (siglo XXI) y cuya capital es Iquitos. Comprende 7 provincias y 48 distritos. Las provincias son: Alto Amazonas Yurimaguas); Datem del Marañón (San Lorenzo); Loreto (Nauta); Mariscal Ramón Castilla (Caballococha); Maynas (Iquitos); Requena (Requena); Ucayali (Contamana).
  3. Los Machiguenga son un grupo indígena de las regiones del sur este del Perú, al este del Machu-Pichu, en la cuenca del Río Urubamba y del Río alto Madre de Dios. Su antigua cultura se basaba sobre la caza, la pesca y la recolección de los frutos de la tierra.


JUAN JOSÉ LARRAÑETA, O.P.

Obispo Vicario Apostólico emérito

©Revista Peruana de Historia Eclesiástica,6(1998)pp.63-79