CHOLULA; Arte Virreinal
Conjunto del Convento de San Gabriel Arcángel
Para consolidar el trabajo civilizador y evangelizador que en Cholula llevaron a cabo los frailes franciscanos, en la mitad del siglo XVI construyeron en esa población un monumental conjunto de edificios, único en la Nueva España. Este conjunto está formado por el Convento franciscano, el Templo dedicado a San Gabriel Arcángel que da su nombre al mismo, la Capilla Real o Capilla de Indios, la Capilla de la Tercera Orden, las Capillas Posas, y un gran Atrio delimitado por una barda rematada por almenas.
El diseño arquitectónico del Convento de San Gabriel es atribuido a fray Toribio de Alcaraz. “De acuerdo con una inscripción ahora desaparecida sobre el arco del coro de la iglesia, la primera piedra del nuevo edificio fue colocada por el obispo Sebastián de Hojacastro (tercer obispo de Puebla) el 7 de febrero de 1549. La bendición del edificio fue dada por el mismo prelado el 30 de abril de 1552 (…) Considerando la fecha, Toussaint quiso atribuir el proyecto al enigmático Toribio de Alcaraz. Sin embargo, nos podemos preguntar si la fecha se refiere a todo el edificio o solamente a la construcción del coro alto o cualquier otra parte de la iglesia.[1]”
El Claustro del Convento es anterior al Templo y su interior estuvo alguna vez decorado con murales realizado por manos indígenas; de ellos se conservan solo algunos frescos. Para mediados del siglo XVI el Convento albergaba solo a cinco frailes que asistían espiritualmente a poco más de doce mil habitantes. El Templo, de grandes dimensiones y que fue señalado como modelo para otras construcciones, consta de una sola nave alargada y dividida en varios tramos, con cerramientos de bóveda de nervadura con elementos góticos y platerescos, aunque el interior es de estilo neoclásico. “Vetancurt calificó la iglesia como una de las mejores fábricas de bóvedas que tiene la provincia.[2]”
La Capilla Real o Capilla de Indios fue edificada con anterioridad al Templo, antes de 1540, y quizá al mismo tiempo que el convento pues “debido a la urgencia de contar con una construcción que funcionara como templo, las capillas abiertas fueron, en su mayoría, las primeras partes que se levantaban de los conjuntos monásticos. La Capilla Real de Indios del monasterio de Cholula es el ejemplo cumbre de las capillas abiertas por sus enormes dimensiones. Originalmente sus arcos estaban abiertos hacia el atrio.[3]”Esta Capilla, de estilo mudéjar en su forma y estructura, destaca además por su techumbre conformada por cuarenta y nueve cúpulas.
Notas
JUAN LOUVIER CALDERÓN
